Hasta las cuatro y media de la mañana estuvo bailando Juan Francisco Mackenna, socio de Carey y Cía, en su cumpleaños. El 2 de julio arrendó la emblemática discoteca Gente, contrató una banda y apagó las velas frente a su familia y cercanos.
"Yo les puse a todos en la invitación 'Celebremos la vida', festejemos estar vivos, bailemos, cantemos. En el fondo, todavía podemos hacerlo", dice sobre esta fiesta, que marca una edad que para él tiene un "significado simbólico".
Llevaba cinco años pensando en esta fecha, porque en Chile cuando se alcanza este momento en la vida, "ya te formaste, educaste e hiciste todas las etapas de la tarea; entonces ahora empiezas una misión mucho más difícil: tu contribución real al país. Como que terminaste tú y ahora comienzas a entregar".
En su profesión, Mackenna dice que ahora comienza la fase más interesante, pues entre los abogados "las canas valen". La trayectoria se aprecia desde el punto de vista de la experiencia y sabiduría. El traje de consejero le queda a la medida.