Cientos de ciclistas en las calles acompañando a los corredores, sperros callejeros y el constante encuentro de maratonistas profesionales con participantes amateurs fueron el punto bajo de la quinta Maratón de Santiago, que TVN transmitió en directo el domingo pasado a todo el país.
A raíz de la masificación de la principal corrida nacional, el comité organizador -Adidas junto con la Federación Atlética de Chile- ya analiza drásticos cambios para el próximo año.
"Estamos pensando en pedir abrir ambos lados de la Alameda o mover la meta hacia un lugar más amplio como el Parque O'Higgins", comentó el gerente de marketing de Adidas, Matías Elizalde.
También se planea separar completamente los 10 kilómetros y 21 km. de la maratón oficial, que abarca los 42 km. Los cambios buscan ubicar a Santiago en el circuito mundial de maratones, como la de Nueva York y la de Berlín, lo cual implica aumentar las medidas de seguridad y el nivel de la competencia.