Hay múltiples razones para argumentar por qué, al parecer, la quinta temporada de Mad Men es una de las mejores. Y no hay que darle muchas vueltas para llegar a la conclusión de que una de esas razones tiene acento francés, se llama Jessica Paré y, en la serie interpreta a la flamante nueva esposa de Don Draper. Y así, mientras Betty engorda y engorda (su papada ya adquiere dimensiones nerudianas) y nos acostumbramos a ver a Joan con cara de trasnoche debido a su nueva vida de madre, toda nuestra atención cae automáticamente en esta actriz canadiense, que se ha convertido en la revelación de la serie. Nacida en Montreal, en 1982, Paré ya tenía varias apariciones en películas más bien desconocidas, de las cuales tal vez Hot Tub Time Machine sea la más fácil de evocar (buscar en la web su breve pero sexy aparición en un jacuzzi). Y para el primer capítulo -de larga duración- de esta temporada, su personaje, Megan Draper, le prepara un regalo de cumpleaños bastante especial a su esposo: la interpretación de “Zou Bisou Bisou”, canción pop francesa emblema de los 60 que alguna vez Sophia Loren cantó y que, por supuesto, deja a todos en la fiesta embobados. Pero como dijo Norman Mailer, los tipos duros no bailan. Y Don Draper, ya lo sabemos, es un tipo duro al que no le gusta demasiado su obsequio de cuarenta años. Y claro: puede que el personaje de Jon Hamm se haga el duro, pero para el resto de los mortales ver el hipnotizador baile de Jessica Paré es algo difícil de resistir.
“Mad Men”, lunes a las 20 h por HBO.